CLICK HERE FOR THOUSANDS OF FREE BLOGGER TEMPLATES »

sábado, 23 de febrero de 2008

Eugénio de Andrade

Adeus

Já gastámos as palavras pela rua, meu amor,
e o que nos ficou não chega
para afastar o frio de quatro paredes.
Gastámos tudo menos o silêncio.
Gastámos os olhos com o sal das lágrimas,
gastámos as mãos à força de as apertarmos,
gastámos o relógio e as pedras das esquinas
em esperas inúteis.

Meto as mãos nas algibeiras e não encontro nada.
Antigamente tínhamos tanto para dar um ao outro;
era como se todas as coisas fossem minhas:
quanto mais te dava mais tinha para te dar.
Às vezes tu dizias: os teus olhos são peixes verdes.
E eu acreditava.
Acreditava,
porque ao teu lado
todas as coisas eram possíveis.

Mas isso era no tempo dos segredos,
era no tempo em que o teu corpo era um aquário,
era no tempo em que os meus olhos
eram realmente peixes verdes.
Hoje são apenas os meus olhos.
É pouco mas é verdade,
uns olhos como todos os outros.

Já gastámos as palavras.
Quando agora digo: meu amor,
já não se passa absolutamente nada.
E no entanto, antes das palavras gastas,
tengo a certeza
de que todas as coisas estremeciam
só de murmurar o teu nome
no silêncio do meu coração.

Não temos já nada para dar.
Dentro de ti
não há nada que me peça água.
O passado é inútil como um trapo.
E já te disse: as palavras estão gastas.

Adeus.


Poem by Eugénio de Andrade

Adiós

Ya gastamos las palabras en la calle, amor mío,
Y lo que nos quedó no alcanza
Para alejar el frío de las cuatro paredes.
Gastamos todo menos el silencio.
Gastamos los ojos como la sal de las lágrimas,
Gastamos las manos a fuerza de apretarlas,
Gastamos el reloj y las piedras de las esquinas
En esperas inútiles.

Meto las manos en los bolsillos y nada encuentro.
Antes teníamos tanto que darnos uno al otro;
Era como si todas las cosas fueran mías:
Cuanto más te daba más tenía para darte.
A veces tú decías: tus ojos son peces verdes.
Y yo lo creía.
Lo creía,
Porque a tu lado
Todas las cosas eran posibles.

Pero sucedió en la época de los secretos,
En la época en que tu cuerpo era un acuario,
En la época en que mis ojos
Eran realmente peces verdes.
Hoy son sólo mis ojos.
Es poco, pero es verdad,
Son unos ojos como los demás.

Ya gastamos las palabras.
Cuando ahora digo: amor mío
Ya no pasa absolutamente nada.
Y antes de las palabras gastadas
Tenía la certeza
De que todas las cosas se estremecían
Sólo de murmurar tu nombre
En el silencio de mi corazón.

No tenemos ya nada que darnos.
Dentro de ti
No hay nada que me pida agua.
El pasado es inútil como un harapo.
Y ya te dije: las palabras se han desgastado.

Adiós.


Poem by Eugenio de Andrade (traducción al castellano)

miércoles, 20 de febrero de 2008

Karate



Photo from Björk Collection

Deixo-me Levar Contigo Deixa-me Aqui



Photo by Anonim

En el Banco de la Calle

En el banco de la calle
Lluvia
De terciopelo hecha
En mi boca
Mis manos
Mi dedo meñique más meñique
La corriente
El relámpago
Golpe
Y me caigo atrapada por la lluvia llorando

“Qué me duele!”

Qué sí que me duele pero no lo sabes ni tú que la has probado

Quítamela de encima que sangro
Sus espinas
Agudas agujas jeringuillas

“Qué me duele!”

Átame completa en tus brazos y dame uno de tus alientos
Hazme creer que mañana no lloverá
Tanta rosa crispada contra mí
Por qué me caigo atrapada por la lluvia llorando

Pero lo qué me duele no lo sabes ni tú que la has probado

Esta tardía estación


Text by Patrícia Luís

domingo, 10 de febrero de 2008

Burbujas Accidentales